Estudiantes cayó por penales ante Aldosivi y se despidió antes de lo esperado
2025-05-31

¡Publicite aquí!

El Pincha cayó en los 16avos de final tras igualar 1-1 en los 90 minutos y perder 4-2 desde los doce pasos. El equipo de Eduardo Domínguez no logró imponer su jerarquía y se despidió de una copa que ilusionaba.
Por: Diego Rivero / Foto: Copa Argentina
En una tarde inesperada y con sabor amargo, Estudiantes de La Plata quedó eliminado de la Copa Argentina en los 16avos de final tras caer por penales ante Aldosivi. Fue 1-1 en los 90 minutos y 4-2 en la definición desde los doce pasos, en el estadio Norberto "Tito" Tomaghello de Florencio Varela. El equipo de Eduardo Domínguez, que llegaba como claro favorito, no pudo imponer su jerarquía y se despidió de una copa que ilusionaba.
El inicio del partido dejó buenas sensaciones para el Pincha. El equipo salió con decisión, manejó la pelota y dominó el juego. La recompensa llegó temprano con una jugada que reflejó la identidad del club: dinámica, inteligencia y contundencia. Una descarga precisa de Tiago Palacios y una definición exquisita de Alexis Castro, que la colgó del ángulo izquierdo de Jorge Carranza, sellaron un gol que hizo soñar a todo el pueblo albirrojo.
Pero el sueño se topó con una respuesta inesperada. Diez minutos después, Justo Giani recibió un pase profundo de Cerato y definió cruzado. El 1-1 fue un balde de agua fría, más por el momento en que llegó que por mérito del rival. A pesar del empate, Estudiantes no perdió la compostura y siguió buscando.
La segunda parte cambió el partido por completo. Un cruce entre Palacios y Mottes terminó con el delantero albirrojo expulsado. Una reacción leve, pero suficiente para que Brian Ferreyra sacara la roja directa. Con uno menos, Estudiantes eligió ser inteligente: se replegó, cerró espacios y esperó su oportunidad. Aun así, no renunció nunca a atacar cuando pudo.
Aldosivi, con superioridad numérica, tuvo la pelota pero no las ideas. No logró romper el bloque defensivo del Pincha, que se sostuvo con firmeza, personalidad y mucho carácter. El partido se fue consumiendo entre tensión y pocas chances claras, hasta llegar a una definición que siempre es cruel.
Desde los doce pasos, la historia se torció desde el primer instante. Castro fue el encargado del primer penal, pero Carranza, con 43 años, adivinó la intención y atajó. A partir de ahí, la confianza cambió de lado. El elenco Marplatense fue certero: marcaron Torres, Preciado y Breitenbruch con autoridad. Estudiantes respondió con los goles de Benedetti y Ascacibar, pero el remate desviado de Arzamendia sentenció la historia. Guerrico no falló y puso el 4-2 definitivo.
La eliminación deja un sabor amargo, no solo por la instancia, sino por el contexto futbolístico que atravesaba el equipo. Estudiantes llegaba en crecimiento, con una idea clara de juego, competitividad interna y señales positivas en el funcionamiento colectivo. Sin embargo, el fútbol muchas veces no ofrece segundas oportunidades.